Ashley Hans Scheirl
Sus primeras prácticas cinematográficas durante las décadas de los ochenta y los noventa del siglo veinte contribuyeron significativamente al desarrollo del arte conceptual en Austria, moviéndose entre las creaciones fílmicas experimentales, las acciones en el espacio público, la interpretación, la música y otras formas de expresión relacionadas con la identidad y sexualidad lesbiana o las comunidades queer. En 1991 realiza su largometraje más conocido de la mano de sus colaboradoras habituales, Ursula Pürrer y Dietmar Schipek. Se trata de la distopia futurista Flaming Ears. Su migración al campo de la pintura fue acompañada de un proceso de reflexión y transición en su identificación de género. Actualmente vive y trabaja en Viena.